
Para algunos, vivir una vida normal es la misión más difícil.
Después de 10 años en prisión en nombre de su jefe, Su Hyuk es liberado, pero el jefe duda de su lealtad. Cuando Su Hyuk visita a su novia abandonada hace mucho tiempo, descubre que ahora es padre de una niña. Quiere cortar los lazos con la pandilla, pero el jefe no está dispuesto a liberarlo y contrata a un famoso asesino. El asesino toma a la hija como rehén y Su Hyuk decide vengarse de la manera que mejor sabe hacer; violencia.